Mientras viva el doliente, de Antonio Daganzo
Ed. Vitruvio.
89 pgs, 10 €
Ya en su anterior libro, Que en limpidez se encuentre, Antonio Daganzo (Madrid, 1976) dio muestras de saber construir cuidadosamente su poesía, mimar el ritmo y encontrar esa sombra musical de la que debe nutrirse cada poema. Ahora publica, Mientras viva el doliente, y se acerca a una voz que alcanza madurez y rebusca en las sombras más precipitadas, tenebrosas y fieles de la infancia.
En este tercer libro del autor, la vida y la muerte se contemplan desde la inocencia, son como dos pájaros que se rozan en su vuelo. Hay muestras de una poesía clásica que se crece en el capítulo Perros de arena, compuesto por nueve sonetos, y en todo el libro un lamento original, sincero y elevado. Poesía de hondura, de preguntas y respuestas.